ENFERMAR ES HUMANO: CUANDO EL PACIENTE ES EL MÉDICO Cátedra de Profesionalismo y Ética Médica. Universidad de Zaragoza • Grupo de Investigación en Bioética de Aragón (GIBA)-IIS Aragón 152 Líneas de trabajo futuras Propuestas de mejora del equipo de investigación para la prevención y la atención al médico enfermo Tras el análisis de los resultados, las propuestas realizadas por los propios médicos y la reflexión del equipo investigador y de asesores externos del ámbito de la profesión médica se plantean una serie de acciones encaminadas a la protección de la salud de los médicos, la mejora de la atención del médico que enferma, y la protección de su profesionalidad y buena práctica. Estas propuestas de trabajo inciden respectivamente en la difusión y traslación de los resultados de la investigación a la realidad de la profesión médica actuando tanto sobre los factores externos (riesgos psico-sociolaborales del colectivo médico) como sobre factores intrínsecos (capacidades y herramientas individuales de los médicos) para una vida más saludable de la profesión médica. Se proponen también estrategias específicas para la atención al médico jubilado y, por último, se realizan recomendaciones deontológicas y de liderazgo desde la Organización Médica Colegial: Estrategia 1: Sensibilizar a la población general, los profesionales y las instituciones sanitarias acerca del proceso de enfermar de los médicos Acciones: 1. Charlas, mesas y comunicaciones en foros nacionales e internacionales. 2. Publicaciones científicas relacionadas con el médico enfermo. 3. Divulgación a través de medios audiovisuales haciendo hincapié en los riesgos del presentismo, la automedicación, la ausencia de seguimiento reglado del proceso de enfermar de los médicos y el apoyo al compañero enfermo. 4. Elaboración de herramientas docentes sobre promoción del autocuidado en la profesión médica y recomendaciones para mejorar el proceso de atención del médico enfermo. 5. Confección de un díptico y un vídeo con recomendaciones sobre el autocuidado de la salud y el abordaje de la propia enfermedad para médicos internos residentes y médicos especialistas en activo. 6. Elaboración y difusión de recomendaciones que orienten sobre actitudes y acciones correctas en el manejo del profesional médico como paciente para servicios de prevención de riesgos laborales y servicios de recursos humanos de las organizaciones sanitarias. Estrategia 2: Definir las tareas de la Organización Médica Colegial y Colegios Oficiales de Médicos en la atención a los profesionales enfermos Acciones: 1. Difusión de las acciones de los Colegios Oficiales de Médicos en pro del cuidado y bienestar de la profesión. 2. Difusión del Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME) orientado al abordaje de los problemas de salud mental y adicciones entre los colegiados. 3. Participación de los Colegios Oficiales de Médicos en el seguimiento y apoyo a los médicos enfermos con propuestas concretas (programa de voluntarios, psicoterapia de acompañamiento durante la enfermedad, asesoría económica y laboral…) considerando explícitamente la perspectiva de género en este seguimiento. 4. Modificación del Código de Deontología Médica que enfatice la importancia del autocuidado de la salud desde el punto de vista del profesionalismo y la deontología de manera que recoja los siguientes puntos: • Se recomienda concienciar a los profesionales sobre la situación de conflicto de rol del médico cuando es paciente y los riesgos que puede entrañar. Esta situación precisa de un aprendizaje para aceptar la nueva realidad. • Se recomienda a todos los profesionales médicos tener un médico de familia de referencia con el que poder consultar sus problemas de salud para garantizar unos cuidados de calidad y seguros. • Se recomienda a todos los profesionales médicos que se identifiquen como tal cuando solicitan atención por un problema de salud, para facilitar la relación con el compañero que les atiende. Es conveniente trabajar en un “manual de estilo” compartido para que los médicos de médicos no se sientan exigidos. • Se recomienda incluir como responsabilidad deontológica el mantenimiento de un estilo de vida saludable y de un adecuado autocuidado físico y psicológico. • Se recomienda considerar la perspectiva de género en relación con el abordaje de los problemas de salud y enfermedad de la profesión médica.
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