VALORES DEL MÉDICO 2021

(O médico honrado es el que, siendo consciente en todo momento de los límites de sus conocimientos y competencias, se preocupa de mantenerlas actualizadas y, por tanto, realiza las actividades de formación continuada que le ayudan a mantener su competencia y su desarrollo profesional continuo. $deP£V XQ P«dLFR ¯QWeJUR eV eO TXe FXLdD VX VDOXd I¯VLFD \ SV¯TXLFD TXe eYLWD deVDUUROODU FRQdXFWDV DdLFWLYDV \ TXe eQ FDVR de eQIeUPedDd UeFXUUe D ODV LQVWDQFLDV DdeFXDdDV FXDQdR eV SUeFLVR (O &'0 eQ VX DUW¯FXOR Ve UeILeUe D ODV FRQdXFWDV TXe Ve deEeQ UeDOL]DU eQ FDVR de eQIeUPedDd deO P«dLFR $V¯ eVWe DUW¯FXOR Ue]D Ȋ6L XQ P«dLFR REVeUYDUD TXe SRU UD]µQ de edDd eQIeUPedDd X RWUDV FDXVDV Ve deWeULRUD VX FDSDFLdDd de MXLFLR R VX KDELOLdDd W«FQLFD deEeU£ SedLU LQPedLDWDPeQWe FRQVeMR D DOJ¼Q FRPSD³eUR de VX FRQILDQ]D SDUD TXe Oe D\Xde D deFLdLU VL deEe VXVSeQdeU R PRdLILFDU WePSRUDO R deILQLWLYDPeQWe VX DFWLYLdDd SURIeVLRQDOȋ < eO DUW¯FXOR dLFe Ȋ6L eO P«dLFR QR IXeUD FRQVFLeQWe de WDOeV deILFLeQFLDV \ «VWDV IXeUDQ DdYeUWLdDV SRU RWUR FRPSD³eUR «VWe eVW£ REOLJDdR D FRPXQLF£UVeOR \ eQ FDVR QeFeVDULR OR SRQdU£ eQ FRQRFLPLeQWR deO FROeJLR de P«dLFRV de IRUPD REMeWLYD \ FRQ OD deELdD dLVFUeFLµQȋ (VWD DFWXDFLµQ QR VXSRQe IDOWDU DO deEeU de FRQIUDWeUQLdDd SRUTXe eO ELeQ de ORV SDFLeQWeV eV VLePSUe SULRULWDULR . La honradez en la relación médico-paciente Éste es el ámbito donde en mayor medida se debe hacer patente la observación de este valor. Un médico integro es el que no falta a la verdad en la relación con los pacientes, empezando por exponer claramente su ámbito de competencia, sus cualificaciones y su cargo actual. 74 El médico ha de mantener informado, de manera completa y honesta, a sus pacientes, con objeto de que éstos sean capaces de tomar decisiones en el ámbito de su autonomía que pueden afectar a procedimientos diagnósticos y terapéuticos. Esto no significa que el paciente se inYolucre en todas y cada una de las decisiones diarias, sino en las que sean releYantes o se refieran a los aspectos clave del plan de manejo de la enfermedad. La información al paciente ha de ser verídica, aunque prudente, tal como señala el artículo 15.1 del CDM. ‘El médico informará al paciente de forma comprensible, con veracidad, ponderación y prudencia. Cuando la información incluya datos de gravedad o mal pronóstico, se esforzará en transmitirla con delicadeza de manera que no perjudique al paciente’. A veces, en relación con la información a sus pacientes, que debe ser verídica, comprensible, mesurada, prudente y honesta, se limita la honestidad del médico, con el objetivo de que los pacientes sean capaces de tomar decisiones sobre esta información sin ‘mentiras piadosas’ para ejercer su autonomía en el ámbito de los procedimientos diagnósticos y terapéuticos. En algún código de deontología se dice que ‘un pronóstico grave debe ser disimulado al paciente, pero explicado a los familiares’. Este comportamiento, aunque comprensible, no puede ser aceptado, por su falta de honradez, ya que todos los que rodean al paciente conocen bien la realidad amarga de su situación, menos él, que es el protagonista de su propia historia. Esta información a los pacientes debe referirse también a los efectos adversos que potencialmente se puedan producir o que hayan tenido lugar como consecuencia un tratamiento, de errores o incidentes. En los casos en que el VALORES DEL MÉDICO