Mujeres pioneras en la Medicina

33 PRIMERAS MUJERES MÉDICAS Primera mujer en España, junto a Dolors Aleu, en obtener el título de Medicina Martina Castells i Ballespí nació el 23 de julio de 1852 en Lleida. A los 8 años dejó sus estudios y se fue a casa de unos tíos en Zumaia para curarse de una oftalmia. Allí aprendió euskera en pocas semanas. Posteriormente, tiene una corea y, por todo ello, la joven dedica todo el tiempo a escribir, particularmente, poesía. Martina pertenecía a una larga estirpe de médicos leridanos. Su padre, Martí Castells Melcior, era médico de baños y fue la tercera generación iniciada por el bisabuelo. Sin embargo, la realización de los estudios no le resultaba fácil tanto por su salud como por el hecho de ser mujer. La Revolución de 1868 supuso un cambio en la vida de Martina, porque el nuevo gobierno permitía que las mujeres estudiasen carreras científicas. Martina terminó el Bachillerato en el Instituto de Lleida, y en septiembre de 1877 ingresó en la Facultad de Medicina de Barcelona, donde coincidió con otras dos mujeres: María Elena Maseras y Dolors Aleu. Martina hizo la carrera en cuatro cursos y terminó en 1881. Antes de terminar los estudios de licenciatura, empezó a hacer gestiones con Madrid para no sufrir demoras en la obtención del título. Dirigió una instancia al ministro de Fomento en la que calificó la negativa de que las mujeres hiciesen el examen de licenciatura de “situación anómala e ilegal, fruto de la ignorancia y la superstición”. También denunció que incluso el Congreso de los Diputados “se ha evadido del hecho” de que las mujeres puedan realizar el doctorado. Cuando acabó los estudios, el 20 de junio de 1881, solicitó, junto con Dolors Aleu, permiso para realizar el examen de licenciatura de Medicina. Tras obtener dicho permiso el 4 de abril del año siguiente, se examinó ese mismo mes y obtuvo la calificación final de aprobado. El 9 de octubre del mismo año, solo tres días después que su compañera Dolors, Martina se doctoró, con la tesis “Educación física, intelectual y moral que debe darse a la mujer para que contribuya en grado máximo a la perfección y dicha de la Humanidad”, en Madrid. La prensa del momento se hizo eco de su éxito y el Dr. Letamendi, su padrino de tesis, escribió en La Ilustración de la Mujer que la joven doctora fue muy bien recibida por los jóvenes estudiantes. La Dra. Castells escribió varios artículos pediátricos que se publicaron en Gaceta Médica, como: “Procedencia del recto en el niño”, “Tratamiento de la compresión de la carótida”, “Reumatismo articular agudo de la infancia” y “Coqueluche”. Martina Castells se dedicó a la Pediatría por consejo de Letamendi, aunque no pudo hacerlo durante mucho tiempo. Se casó el 17 de marzo de 1883 en Barcelona con Antoni Constantí, médico militar del Instituto Pere Mata de Reus, y un año después (1884) murió a causa de una nefritis cuando estaba embarazada. Tenía tan solo 31 años y apenas había tenido tiempo de ejercer. •

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